Consejos para cambiar la bomba de agua

La bomba de agua es la pieza principal del sistema de refrigeración de tu vehículo, y por este motivo debe estar en perfecto estado. Si necesitas repuestos de calidad para tu vehículo los puedes conseguir en despiecesde, porque es el mejor desguace online que podrás encontrar.

Sin embargo, debes tener claro que existen algunos consejos que resultarán fundamentales para que puedas cambiar la bomba de agua de forma exitosa. Por este motivo, te he preparado este post, en el cual encontrarás toda la información que necesitas para hacer esta reparación.

¿Cómo se cambia la bomba de agua?

Tendrás dos opciones para hacer el cambio de la bomba de agua, siendo la primera llevar el coche a un taller y que allí se encarguen del proceso. Pero, es la opción más costosa, porque dependiendo de la mano de obra podría llegar a tener un coste de hasta 1000 euros.

Por otra parte, puedes hacer la reparación por tu cuenta, y comprar una bomba de agua de segunda mano en un desguace por un precio de 150 euros o menos. Para hacer el cambio por tu cuenta debes fijarte en los siguientes puntos básicos:

Quita la bomba rota

Será el momento de quitar la bomba de agua rota, no sin antes comprobar que el vehículo esté completamente frío. Se recomienda que mantengas el coche elevado durante el proceso porque esto facilitará en gran medida el proceso de drenaje del líquido refrigerante.

Cuando tengas el vehículo en posición, será el momento de comenzar por el drenaje del líquido refrigerante. Una vez que termines el drenaje, será importante desconectar las mangueras de la bomba de agua y proceder a quitar los tornillos de fijación para retirarla del motor. Asegúrate de que la zona quede completamente limpia antes de proceder con la instalación.

Instala la bomba de repuesto

Es vital antes de instalar la bomba de repuesto verificar que sea del mismo modelo exacto que la que acabas de quitar. De esta forma, evitarás problemas de incompatibilidad de la bomba y podrás instalarla sin ningún inconveniente fijándola con los tornillos y conectando las mangueras.

Una vez que todo esté bien ajustado, será el momento de rellenar el sistema con líquido refrigerante y verificar que no existan fugas. Si no existen fugas, enciende el motor del coche para purgar el sistema, rellena el faltante de líquido refrigerante y deja el coche en reposo por un tiempo de 4 horas antes de volver a utilizarlo.